Samantha Kittle tiene 27 años, es actriz y vive en Nueva York. Le diagnosticaron cáncer. Y encontró alivio y sostén escribiendo un blog, donde apela al humor para contar cómo vive el tratamiento.

El sitio se está convirtiendo en un referente para muchas personas que atraviesan lo mismo que ella, y que encuentran en sus palabras una dosis de esperanza.

Con ejemplos desopilantes y mucha creatividad, Samantha narra los cambios de su cuerpo y de su vida.

Por ejemplo, para disimular la caída de su pelo, se prueba pelucas de colores fluorescentes y publica las fotos. O cuenta que es “tomada como rehén de unos extraterrestres” cuando la internan para hacerle la radioterapia.

“Escribir es absolutamente terapéutico para mí. Por el momento he pospuesto las actuaciones hasta que me sienta mejor, pero no descarto participar en el corto de un amigo”, contó a Elmundo.es. “Publicar mi blog es una manera de encontrar tonterías sobre las que escribir en mis días tristes de tratamiento”, agregó.

Su diario online es, también, un medio para comunicarse. “La gente me escribe para contarme cómo mis situaciones divertidas les ayudan a tener menos miedo antes de los tratamientos”, dijo.

“Muchos de ellos también recurren al humor para hacer frente a la enfermedad, y es reconfortante para ellos saber que no están solos en esto”, compartió.