En términos médicos, la vagina es únicamente el canal que comunica el exterior con el interior, el conducto por donde entrarán los espermatozoides. Su función es recibir al pene durante la relación sexual y dar salida al bebé durante el parto.

En la parte interna también se encuentran los ovarios, las trompas de Falopio y el útero. La parte exterior, lo que podemos ver y tocar, se llama vulva y está compuesta por el clítoris, los labios mayores y menores, el Monte de Venus y el vestíbulo vulvar. Sin embargo, de manera común las mujeres nos referimos a todo esto como vagina.

Ahora, lo que podemos conocer, ver y tocar es la vulva, la parte externa. El clítoris es la parte central y es considerado el homólogo del pene. Es un órgano eréctil y sumamente erógeno, lo cubren los labios menores y luego los labios mayores recubren toda la zona, fungiendo como “puertas” de acceso al clítoris.

El vestíbulo vulvar es un área en forma de almendra (por lo general) que tiene 6 orificios, uno para la uretra, el orificio vaginal (por donde entra el pene), las glándulas de Bartolino y las glándulas parauretrales de Skene.

Cada vulva está compuesta por estos elementos aunque ninguna es igual a otra, así como no hay 2 narices o 2 orejas iguales cada mujer tiene una forma vaginal diferente, algunas tienen los labios mayores muy grandes, otras tienen el clítoris en forma triangular y otras ovalado. Cada cuerpo es único e irrepetible y no hay vaginas feas o bonitas, cada una es diferente.

¿Cuándo debemos preocuparnos?

Nuestra vagina es perfectamente normal salvo que:

Nos dé comezón

Esté roja

Tenga un olor fuera de lo común para nosotras

Presente puntos blancos y/o rojos

Presente secreciones de colores anormales

Como cada cuerpo es diferente, cada vagina tiene un olor particular. Es nuestra responsabilidad conocer nuestra vulva para poder identificar cuando presente un olor anormal o un color fuera de su cotidianidad. Ahora, lo que es normal para mi no será normal para la de al lado.

Ninguna tenemos la vagina fea así como no hay orejas feas sino gustos diversos. No hay un estándar que indique que un clítoris grande es mejor o que los labios gruesos son más atractivos, simplemente son.

Fuente: ActitudFem

TAGS RELACIONADOS