Especialmente si consumen cigarrillos antes de la menopausia y antes de dar a luz a su primer bebé, según reveló una investigación del Instituto Nacional del Cáncer (INC).
Esto se debería a las sustancias carcinógenas que tiene el tabaco, el componente principal del cigarrillo. Al respecto, el Dr. Roly Hilario Esteban, ginecobstetra de la clínica Oncogyn de Miraflores, explica que “estos químicos lo que hacen es alterar los genes controladores del crecimiento de tumores”.
“Cuando aparece una célula anormal en el organismo, los genes supresores de tumores van a ir a eliminar esa célula. Pero, si ese gen se daña, la célula anormal seguirá creciendo, provocando el desarrollo de algún tipo de enfermedad oncológica en las mamas, explicó el especialista.
En ese sentido, agregó que el control de la multiplicación celular tiene que ver mucho con dichos genes que promueven la formación de cáncer. “Debe quedar claro que fumar produce exactamente un desequilibrio, en el cual puede verse afectado el funcionamiento de las células”, argumentó el experto.
De otro lado, el Dr. Hilario Esteban recomendó que todas las mujeres deberían hacerse sus chequeos ginecológicos preventivos, así fumen o no. Pero, obviamente, las fumadoras con mayor obligación. “Se sugiere hacerse un chequeo integral cada año para descartar algún tipo de cáncer”, concluyó.
Finalmente, se supo de otro estudio, pero esta vez organizado por investigadores de la Escuela de Medicina de Harvard. A través de este se determinó que aquellas mujeres que iniciaron a fumar antes de los 17 años aumentaban sus riesgos de cáncer de mama. Para la evaluación, se recogió una muestra de 9 mil féminas.