Los anticonceptivos hormonales definitivamente tienen un gran impacto en tu cuerpo. Pueden alterar tu peso, tu piel, la forma en la que experimentas el síndrome pre-menstrual, y tal como lo hemos visto hoy, la forma en la que funciona tu ciclo reproductivo.
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Ovulación
La ovulación es cuando tus ovarios liberan un ovulo maduro, es decir, uno que está listo para ser fertilizado. Una vez liberado, el ovulo viaja a través de las trompas de Falopio, donde puede encontrarse con cualquier espermatozoides que esté en ese lugar, teniendo como resultado los primeros comienzos de lo que luego será un ser humano. La ovulación se genera gracias a bajos niveles de estrógeno, testosterona y progesterona.
¿Cuál es la diferencia al tomar pastillas anticonceptivas?
Cuando tomas pastillas, no puedes tener niveles bajos de estrógeno o progesterona en este momento del ciclo porque estás activamente consumiendo las versiones sintéticas de las mismas, lo que hace que los niveles se mantengan más altos. En esencia, las pastillas detienen la ovulación debido a que los niveles de estrógeno y progesterona que consumen no permiten que se desarrolle una baja en los niveles hormonales, lo que luego generaría la maduración y liberación de los óvulos.
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Espera… ¿Pero cómo puedes embarazarte igual cuando tomas pastillas? ¡Buena pregunta! Los anticonceptivos orales no son 100% efectivos, después de todo, no existe método que lo sea. Si tomas tu pastilla de forma correcta, es decir, todos los días, se ha visto que puede ser un 99.9% efectiva que es lo mejor que podemos esperar. Sin embargo, puedes embarazarte justo después de dejar la pastilla porque tu cuerpo es resiliente e inmediatamente regresa a sus niveles normales de hormonas. Si te saltas aunque sea sólo una dosis, hay posibilidades de embarazo.
Menstruación
Tu cuerpo se prepara para menstruar durante la fase luteal de tu ciclo, la cual comienza el día después de comenzar a ovular y termina cuando comienza tu período. En esta fase, tu cuerpo comienza a generar altos niveles de progesterona y estrógeno lo que causa que el recubrimiento uterino aumente de grosor ante la posibilidad de albergar un embrión.
La menstruación aparece ante una baja en los niveles de estrógeno, testosterona y progestina, algo que se produce una vez que el útero no recibe ningún embrión luego de ovular. Esta baja también genera el síndrome premenstrual, el cual puede ser poco placentero para tu cuerpo y tus estados de ánimo.
¿Cuál es la diferencia al tomar pastillas anticonceptivas?
Tal como con la ovulación, los cambios hormonales que generan el crecimiento y luego el rompimiento del endometrio no ocurren cuando tomas dosis hormonales diariamente, por lo que realmente no te llega el período. La falta de esta baja de hormonas también tiene como resultado la ausencia del síndrome premenstrual, razón por la cual muchas personas toman pastillas anticonceptivas para combatir los efectos físicos y emocionales de sus ciclos.
Sin embargo, muchos métodos anticonceptivos te dan algo muy parecido a tu período: sucede cuando te tomas las pastillas placebo de tu pack mensual. Diversas investigaciones han demostrado que realmente no necesitas sangrar cada mes, y esa es la razón por la que algunas personas deciden saltarse las pastillas placebo y seguir con las pastillas con hormonas.
Entonces… ¿Qué es ese sangrado mensual si no es mi período?
Se le llama sangrado de abstinencia y es la reacción que tiene tu cuerpo al abstenerse de tomar los niveles de hormonas a los que se ha acostumbrado durante el resto del mes. Este sangrado usualmente suele ser más corto y más leve que tu período natural debido a que los anticonceptivos hormonales han evitado que el endometrio crezca, por lo que no hay mucho que expulsar.