¿Buscas un ejercicio sencillo y fácil de incluir en tu rutina y vida diaria? Entonces has encontrado lo que buscabas porque el mundo de las sentadillas acaba de darnos justo lo que buscábamos: un ejercicio fácil de hacer que no requiere mayores accesorios y que, hecho con buena forma, puede tonificar y esculpir tus glúteos y piernas.

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La particularidad de este ejercicio radica en el ángulo de las piernas, más abiertas de la usual posición en la que los pies siguen la línea de los hombros, y es de ahí mismo que toma su nombre ya que emula la posición de combate de los sumos. Es por esta razón que trabaja de forma más activa los glúteos, cuádriceps y femorales, es decir, las partes posteriores y delanteras de tus piernas.

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La forma de hacerlo es la siguiente:

1. Posiciona tus pies a una distancia mayor al de la separación que existe entre tus hombros, de esta forma lograrás la ‘forma sumo.’

2. Contrae los abdominales y lentamente baja lo más que puedas cuidando de no despegar los pies del suelo y de no encorvar la espalda.

3. Sube completamente hasta quedar en la posición inicial y vuelve a repetir.

Intenta no excederte y comenzar con un número de repeticiones que no sean demasiado difíciles de mantener, concéntrate en el número de repeticiones que puedes hacer sin perder la forma correcta del ejercicio. Luego haz 3 series. Por ejemplo, si el máximo de repeticiones que puedes hacer antes de perder la forma es 5, elige hacer 3 series de 5 repeticiones. Es decir: haz 5 sentadillas, descansa, 5 sentadillas más, otro descanso y finaliza con 5 sentadillas más.

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