Esta sensación es uno de los principales síntomas de la dispareunia, que es el dolor al tener relaciones sexuales, impidiéndonos disfrutar del encuentro con nuestra pareja.

Según la Dra. Angélica Illescas, Gineco-obstetra, la dispareunia femenina es el dolor que se presenta antes, durante y después del coito sexual.

Este padecimiento implica una serie de molestias como ardor o un dolor intenso que puede localizarse en la parte inferior o exterior de la vagina, así como en la región pélvica.

¿Qué lo ocasiona?

Este dolor puede presentarse por diversos factores:

Por presencia de infecciones urinarias o vaginales

Por enfermedades de transmisión sexual

Por usar jabones o productos agresivos que alteran nuestro PH

Por mala higiene

Por usar tangas y ropa ajustada frecuentemente, ocasionando inflamación e irritación

Por el uso frecuente de espermicidas y cremas anticonceptivas

En algunos casos, por el uso del condón (ojo, antes de tomar decisiones alocadas debemos ir con el ginecólogo)

Por la presencia de alteraciones físicas en la zona genital como desgarres y cicatrices (sobre todo después del parto)

Por resequedad vaginal debido a la disminución en los niveles de estrógeno y/o progesterona causada por cambios hormonales o durante la menopausia

¿Qué hacer para prevenirla?

Muchos de los factores que ocasionan la dispareunia pueden prevenirse y/o aliviarse. La Dra. Illescas comentó que es importante usar productos creados específicamente para atacar este problema.

La industria farmacéutica ha desarrollado diversos geles, cremas y pastillas que contribuyen a mantener el equilibrio natural de la flora y evitar la proliferación de hongos y bacterias.

Ella recomienda utilizar productos que no contengan jabón y que respeten el PH fisiológico de esta zona. Su recomendación puntual es el GYN-8 de Uriage, un gel limpiador de uso externo elaborado a base de agua termal que calma y alivia la irritación, comezón y sensación de incomodidad.

Consecuencias de la dispareunia

Creo que no tenemos que ahondar mucho en las consecuencias para nuestro cuerpo y nuestra mente de la falta de sexo, pero básicamente la falta de deseo sexual se da cuando presentamos dispareunia.

Al sentirnos incómodas o molestas cuando tenemos sexo, lo más natural es que dejemos de tenerlo. Esto ocasiona que vayamos perdiendo poco a poco el interés en nuestras actividades sexuales lo que puede resultar en anorgasmia (la horrible falta de orgasmos).

La dispaurenia también puede presentarse por falta de lubricación vaginal y esto se debe principalmente a factores psicológicos con los que es muy fácil trabajar si te acercas a un especialista.

Al primer síntoma de dolor chicas es necesario ir al ginecólogo, nadie mejor que él (o ella) para decirnos si se trata de un padecimiento serio o de algo que puede solucionarse fácilmente, lo importante es no guardarnos el dolor y acudir con el médico para evitar consecuencias a largo plazo.

Fuente: ActitudFem