Expertos aseguran que caminar tres horas a la semana reduce en un 50% el riesgo de morir de cáncer de seno y colon. La caminata, además de salvar vidas, reduce considerablemente el peligro de contraer nuevas enfermedades.

Los pacientes con estas enfermedades además de seguir las indicaciones de sus médicos, y sus tratamientos, como la quimioterapia, deben caminar para que el proceso que siguen den un mejor resultado.

Caminar oxigena el cuerpo, ayuda a la buena circulación de la sangre y ejercita todo el cuerpo de una manera segura y fácil.

Así que ya sabes, si quieres prevenir el cáncer sólo tienes que caminar, pero antes de iniciar cualquier plan de ejercicios, es vital consultar con el médico o especialista.