Las mujeres que tienen perro hacen más ejercicio. Según un estudio publicado en la revista PLoS One, cumplen con los 30 minutos diarios recomendados en un 50% más que las mujeres que no tienen mascota.

Los doctores Erika Friedmann y Aaron Katcher, de la Universidad de Pensilvania, demostraron que la interacción con animales puede ser beneficiosa para la salud de las mujeres.

Esos investigadores comprobaron, también, que el acariciar o contemplar a su perro unos minutos al día provoca una disminución de la presión arterial y del ritmo cardíaco.

En relación con los aspectos psicológicos, observaron varios factores que contribuyen a incrementar la longevidad y disminuir la morbilidad de aquellas que viven con animales.

-La dependencia de los animales estimula en las personas diversos comportamientos relacionados con su cuidado, lo cual las obliga a mantenerse activas.

-El intercambio de afecto contribuye a mejorar el estado emocional.

-Los animales son un estímulo para que las personas realicen ejercicio. Para la mayoría de los enfermos cardíacos, caminar es una actividad imprescindible y un perro suele ser un excelente compañero de paseo.