En palabras de la psicóloga Solange Majluf, el quererse a si mismo implica mirar hacia adentro, observar como adecuadas características o acciones personales. El quererse llega como resultado de las acciones que uno hace con convicción.

Desgraciadamente nuestra sociedad vende la idea de belleza y juventud como sinónimos de felicidad, aceptación porque mirándolo desde afuera parece cierto. Con tan solo una “jaladita”o una “limadita de hueso” los miedos, las ansiedades, las depresiones todo desaparece, nos convertimos en seres seguros de nosotros mismos, con aplomo. Como si una nariz más recta nos asegurara a la pareja de nuestros sueños.

El físico atrae pero no necesariamente enamora. Hace muchos años en el programa Nubeluz una de las Dalinas se suicido y era preciosa ¿cómo explicar algo así?; ¿cuántas modelos preciosas caen en drogas o en relaciones de pareja abusivas?

De hecho si a uno le molestan unos pechos pequeños o una nariz prominente ¿por qué no arreglarlas?. Pero antes de someterse a una operación estética uno debe tener bien claro que no necesariamente nos convertirá en seres con autoestima y seguros de nosotros mismos.