Cada vez que exfolias tu piel estás eliminando células muertas, gracias a esto, luce más radiante y suave. Por ello es importante que realices una exfoliación sin importar la época del año, desde la cara hasta los pies.

Recuerda que siempre es mejor productos que contengan sal, azúcar, almendras, nueces, semillas o componentes granulados. Es importante que realices el tratamiento una o dos veces por semana para lograr una piel sedosa. ¡Y para ello no tienes que gastar mucho dinero!

Te enseñamos una receta casera para cuidar tu piel.

¿Qué necesito?

- Un limpiador exfoliante- Una esponja vegetal- Un cepillo para el cuerpo

- Guantes exfoliantes- Piedra Pómez- Crema hidratante (La indicada según tu piel)

Los 10 pasos para exfoliar la piel:

1. Prepara la piel para el proceso de exfoliación antes de la ducha pasando la esponja, cepillo o guante en seco. Comienza con las plantas de los pies.

2. Humedece tu cuerpo en la ducha.

3. Con la piedra Pómez elimina las asperezas y callosidades de tus pies. Si se te hace difícil, remójalos en un recipiente con agua tibia y leche por 30 minutos antes de entrar a la ducha.

4. Aplica el limpiador exfoliante con la esponja o guantes, primero en movimiento circular a partir de la planta de los pies y continúa hacia arriba.

5. Con el cepillo, exfolia la espalda y los lugares de difícil acceso.

6. En la cara utiliza productos especialmente elaborados para esta zona, pues son más suaves que los que sirven para todo el cuerpo.

7. No olvides exfoliar tus manos.

8. Enjuágate con agua tibia y luego fría. Aplica un gel de ducha para suavizar la piel, si así lo deseas.

9. Al salir de la ducha aplica la crema hidratante que contenga ácidos alfa, pues eliminan las células muertas de la piel.

10. Mantén tu piel siempre hidratada y utiliza cremas hidratantes corporales todos los días.