Él mismo se ha encargado de diseñar un exclusivo broche con el que agradecer a su mujer que le haya convertido en padre.

Aprovechando sus conocimientos en Historia del Arte y dejándose aconsejar por los joyeros reales, el Príncipe Guillermo ha dado rienda suelta a su creatividad para repetir el gesto que su padre, el Príncipe Carlos, tuvo con la fallecida Lady Di tras su nacimiento.

La joya es un diamante rosa engastado en un pasador, una pieza sencilla y muy femenina que concuerda con el estilo de Catalina de Cambridge.

Según informa Paris Match, al principio Guillermo había pensado en regalarle una joya de su madre pero luego optó por algo único.

Al parecer, también habría deshechado la idea de impresionar a Catalina de Cambridge con un diamante y, por eso, pasó a diseñar un exclusivo broche para la que es, sin duda, la mujer de su vida.