La industria portuguesa del calzado decidió volcarse a principios de siglo XXI en la comercialización internacional de su producción.

Zapatos cuyo diseño sigue las tendencias internacionales, indica, y que pueden ser llevados de igual manera en Lisboa que en el resto del mundo.

Desde el lado creativo, el diseñador de zapatos de lujo Luis Onofre cree que el éxito de la producción lusa viene de “aprovechar una escuela antigua de conocimiento sobre la moda de hoy”.

Mujeres tan dispares como la actriz Naomi Watts o Paris Hilton han escogido los diseños de Onofre para lucirlos ante las cámaras. Sus diseños fueron elegidos también por Michelle Obama.

Pippa Middleton y su madre, quienes encargaron zapatos de Helsar para la boda real, la cantante Madonna o el deportista David Beckham son otros de los rostros conocidos que han confiado en el “Made in Portugal” para vestir sus pies.

Sin embargo, Onofre no considera que los portugueses quieran competir con industrias como la italiana a través de los famosos.

Al contrario, alaba las referencias clásicas de esa “escuela” italiana, como Salvatore Ferragamo o Sergio Rossi, y cree que deben servir de referencia para la elaboración de zapatos de calidad. EFE