La versión inglesa de la revista Elle tiene en su portada a la estrella americana Kirsten Dunst. Desbordando dulzura y sensualidad, la publicación se convierte en el retorno de la joven actriz tras una cuestinada temporada fuera de la escena, donde se mantuvo en rehabilitación, además de algunos intentos fallidos de volver a la realizar películas.

El personaje de chica inocente que hiciera en Hollywood, la lleva a regresar al mundo del entretenimiento. La portada refleja un verdadero sentido fresco en su imagen.