La coronación de Miss Amazonas en Brasil terminó con un escándalo cuando la primera finalista, Sheislane Hayalla, de 23 años, decidió quitarle la corona a la ganadora Carolina Toledo y lanzarla al suelo.

Carol Toledo es una chica que compartía el mismo sueño que sus compañeras: ganar el concurso de Miss Amazonas 2015. Con lo que ella no contaba es que su coronación se volvería viral no por el impacto de su belleza sino por el enojo de su compañera, la modelo Sheislane Hayalla, quien se enfureció al escuchar que ella no era la ganadora y entonces, en un arrebato, le arrancó su corona.

La tan preciada joya, característica de las reinas de belleza, cayó al piso. El público presente estaba atónito. El momento del caos se ha repetido inumerables veces en las redes sociales, donde ya suma millones de visitas.

La situación no pudo ser más surrealista e imprevisible. Tras nombrar a Carol Toledo como ganadora del evento, Hayalla abrazó a su compañera para felicitarla y se retiró a un segundo plano.

Pero cuando estaban coronando a Toledo, se acercó la enfurecida perdedora y le arrancó la tiara, despeinándola, y la arrojó contra el suelo para sorpresa de las otras concursantes y todos los presentes en la gala.

Al día siguiente, la modelo explicó a través de su página de Facebook el por qué de su actuación.

“Quería expresar mi desaprobación por las acciones en los preparativos del Miss Amazonas 2015. ¡Quiero algo limpio y honesto!”, indicó. La modelo amazonense de 23 años considera que hubo fraude en esta edición de Miss Amazonas y que la ganadora compró su título.

Además dejó bien claro que no se arrepiente de lo que hizo. “No me arrepiento de haber protestado, en la mayoría de los grandes contratos ocurren estos problemas y quedan impunes, creo que yo he plantado el cambio dentro de este gran concurso”, ha sentenciado antes de dar las gracias por los comentarios de apoyo que ha recibido.

Hayalla fue Miss Amazonas Globo en 2013, Miss Brasil Globo en el mismo año y representó a su país en el certamen de Miss Mundo Internacional en 2013.

“Soy Sheislane Hayalla y mi actitud no me disminuye o me hace menos miss, soy humana, corre sangre por mis venas y no soy hipócrita”, ha defendido la modelo.