Penélope Cruz y su hermana Mónica hicieron llevar a la ruina a una marca de modas suiza por no convertirse en la inspiración de muchas mujeres del país herlvético. Las suizas han demostrado no sentirse identificadas con ellas y han dejado de comprar en sus tiendas de forma súbita.

La diva española se había convertido en la cara de muchas campañas de belleza como L’oreal. Producto de su imagen latina y elegancia la actriz formó parte de prestigiosas firmas como Ralph Lauren.

Charles Vögele Switzerland eligió a las dos actrices para lucir sus prendas, pero parece que las Cruz no responden al patrón de la mujer suiza. Este rechazo hizo perder a la empresa más de cincuenta millones de euros en seis meses. Tal es el fracaso de la campaña que las hermanas no podrán celebrar su primer año como imagen de la casa suiza. André Maeder, director ejecutivo y responsable de la contratación de las españolas, quedó despedido por la cuantiosa pérdida.