“Hoy no, mi amor, tengo dolor de cabeza”. ¿Cuántas veces ha escuchado eso un hombre? Mientras que la sabiduría convencional nos ha mostrado que suelen ser las mujeres las que inevitablemente pierden el interés en el sexo, lo opuesto también suele ser cierto.
Hay varias causas físicas posibles que expliquen el bajo deseo sexual masculino, desde enfermedades cardíacas, antidepresivos, uso de alcohol o drogas, hasta bajos niveles de testosterona.
La crisis económica ha afectado seriamente a varios hombres, con cambios o pérdida de empleo, temores financieros y depresión, que pueden sumarse para reducir la libido. Podría sentirse menos hombre, sin importar que su pareja no deje de decirle que el dinero no importa.
También lo que ocurre fuera de la habitación afecta lo que ocurre dentro de ella, y cuando un hombre está aburrido en una relación, tiende a aburrirse dentro de la alcoba. Otra razón es la pornografía, los hombres con bajo deseo simplemente no tienen el entusiasmo por el sexo real porque están agotados por la masturbación.