Poco importa el puesto en el que llegó cruzar la meta de la competencia de esquí en la modalidad cross country (campo traviesa) realizada hoy en las Olimpiadas de Sochi 2014.

Lo importante aquí es que el atleta peruano de 42 años tuvo una presentación digna del elogio. Compitió y terminó la travesía a pesar de tener dos costillas rotas.

A través de su cuenta en Twitter, el propio Carcelén agradeció las muestras de cariño recibidas de miles de peruanos.

Segundos antes de cruzar la línea roja, Roberto pidió una bandera peruana y, en un momento muy emocionante, culminó su objetivo abrazado a la misma.