Enrique Peña Nieto presenta el tercer informe de su Gobierno en México, a poco de cumplirse un año de la masacre de los 43 estudiantes de Ayotzinapa y sin novedades del paradero del prófugo capo Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán.

El , a quien respalda el 44% de mexicanos, se refirió a las de Iguala y a la segunda fuga de una prisión de máxima seguridad del más peligroso del .

“Nuestro país se vio profundamente lastimado por una serie de casos y sucesos lamentables. Estas situaciones son muy distintas entre sí, pero todas lastiman el ánimo de los mexicanos y la confianza ciudadana en las instituciones”, observó.

En cuanto a la lucha contra el narcotráfico y la inseguridad, Peña Nieto recalcó que, según su conteo, han capturado a 92 de los 122 delincuentes más buscados. Frente a la corrupción, otro de los principales problemas, prometió promover medidas que le hagan frente, así como respaldar el respeto a los derechos humanos.

De otro lado, Peña Nieto aclaró que no aumentará impuestos y subrayó que continuará la reforma educativa, programa que le ha ocasionado críticas de gremios.

El jefe del Estado se ha enfrentado este año a escándalos inmobiliarios, entre ellos el de la millonaria residencia de su esposa, Angélica Rivera. En la administración, ha lidiado con el freno de la economía de México.

Entre los logros a la mitad de su gestión, mencionó las reformas energética, de telecomunicaciones y financiera.