El (BM) publicó hoy un alarmante informe sobre la cantidad de comida que se desperdicia en el mundo. Entre 1.000 millones de toneladas (25%) y 1.320 millones de toneladas (33%) de alimentos para el consumo se pierden cada año.

Para el presidente del BM, Jim Yong Kim, lo más grave es que mientras millones de personas mueren de hambre en las zonas más pobres del planeta, la comida que podría sacarlos de su situación precaria termina en un tacho de basura o se descompone antes de llegar a los hogares.

Las frutas y vegetales representan el 44% del total de toneladas de alimentos perdidos o tirados a la basura. En cuanto a contenido calórico de los alimentos, los cereales desperdiciados representan el 53%, según los datos del Banco Mundial.

Mientras que cada vez se desperdician más alimentos, los precios internacionales continúan bajando, lo que evidencia una paradoja. El economista superior del Banco Mundial José Cuesta explicó que en el último trimestre de 2013, el costo cayó 3%, debido a cosechas récord y stocks alimentarios fuertes.

Entre las recomendaciones del BM, los expertos consideraron que el hambre puede combatirse mediante nuevas técnicas de producción de vegetales, así como en la mejora del transporte de estos alimentos para evitar su descomposición antes de llegar a los mercados y fomentar un comportamiento responsable entre los consumidores.