El presidente de Bolivia, Evo Morales, sospecha que el , fue envenenado y acusó al “imperio”, en referencia a Estados Unidos, de maquinar una estrategia para “derrotar gobiernos que están contra el capitalismo”.

“Casi estoy convencido que es envenenamiento lo de Chávez”, afirmó en La Paz el mandatario en un acto público realizado en Palacio Quemado, durante la promulgación de una ley que endurece las penas contra los agresores de mujeres y que incorpora el feminicidio como delito de orden penal.

Morales, quien llegó al país esta madrugada, acompañando las exequias del presidente venezolano, fallecido debido a un cáncer. “El imperio tiene todos los instrumentos para planificar acciones, para derrotar gobiernos y líderes de movimientos sociales que están contra el capitalismo”, afirmó.

Las sospechas de Morales coinciden con la posición que expresó el ahora , quien, poco antes de la muerte de Chávez, ya había anunciado que se realizará una investigación sobre el “ataque” que habría sufrido el exmandatario, aunque no precisó la naturaleza del mal que acabó provocó la muerte de su líder.

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