Hoy comenzó la costosa operación para enderezar el crucero , en el que murieron 32 personas –entre ellas dos peruanos–, el 13 de enero de 2012 al encallar en una roca frente a la isla italiana de Giglo, en el mar Mediterráneo.

Debido a las 112 mil toneladas de peso de la nave y unos 290 metros de longitud, las labores son complejas y representan un reto para la ingeniería, explicaron los expertos. , cifra superior a lo estimado en un principio.

Los técnicos e ingenieros demoraron cerca de tres horas en desencallarlo por completo de la roca en la que había quedado volteado tras el naufragio. El objetivo es rotar el barco 65 grados y hasta el momento se enderezó en 10 grados.

Las empresas a cargo del proyecto, la estadounidense y la italiana , explicaron que la operación es cuidadosa para que no se viertan sustancias contaminantes. La embarcación será llevada a las costas italianas una vez que se coloque en posición vertical.

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