California es a partir de hoy el quinto estado de Estados Unidos que permite la eutanasia.

El gobernador de California, Jerry Brown, firmó una ley que busca ofrecer a los pacientes con enfermedades terminales la posibilidad de acabar con sus vidas. La fue consultada con médicos y miembros de la Iglesia católica, que se opone a la medida.

“Al final, reflexioné sobre lo que a mí me gustaría a la hora de enfrentar mi propia muerte. No sé lo que haría si estuviera muriendo con un dolor prolongado e insoportable, pero estoy seguro que sería un consuelo tener la posibilidad de considerar las opciones que ofrece esta ley. Y no negaría ese derecho a nadie”, señaló el político de 77 años.

La disposición que permite el suicidio asistido ya rige en Montana, Oregon, Washington y Vermont.