La trabajadora del sector textil que quedó de una fábrica colapsada en Dhaka, Bangladesh, fue dada de alta hoy.

“Me siento estupendo ahora. Me he recuperado mentalmente y físicamente”, aseguró Reshma Begum, de 19 años, al salir del hospital después de un mes de tratamiento.

Para sobrevivir, la adolescente tomó el agua que conseguía de la lluvia y comió las loncheras de los otros trabajadores. “Cuando pienso en esos días, me siento mal y asustada. Me he olvidado la mayor parte de lo que hice bajo los escombros”, reveló Begum .

El derrumbe del Rana Plaza, el 24 de abril, . En el edificio funcionaban varios talleres que confeccionaban ropa para el Occidente. El país asiático tiene una de las industrias textiles más grandes del mundo: mueve US$20 mil millones al año.

Reshma, ahora una heroína nacional, aceptó un trabajo en el lujoso hotel Westin en Dhaka. Poco después de su rescate, aseguró que nunca volverá a trabajar en el sector textil de su país.