Pese a que la FIFA decidió suspender la sanción que recaía sobre nuestro primer escenario deportivo, desde la FPF decidieron dejar en cero la apelación presentada y respetar el castigo impuesto en un principio.

“Se ha informado que vamos a desistir la apelación que se presentó a la FIFA en vista al hecho que no haya sido resuelta de manera inmediata, a nuestro criterio de forma errónea, porque nosotros nos hemos allanado a la multa y postergar esa decisión podría representar un grave perjucio para el proceso de Rusia 2018”, manifestó Manuel Burga a RPP.

Y es que la suspensión del castigo no es definitivo y la FIFA podría determimar que su castigo se cumpla en el próximo proceso eliminatorio.

“Hemos preferido desistir, allanarnos a la decisión y jugar a puertas cerradas”, reiteró Burga Seonane.

Lo que no aclaró el presidente de la FPF es que si el partido programado para el 15 de octubre se disputará de todas maneras en el Estadio Nacional o cambiará de escenario.