El partido se juega dentro y fuera de la cancha. Cientos de hinchas peruanos se apostaron en las afueras del Hotel Sheraton, lugar de concentración de la selección uruguaya.

Cantando y armados con bombos, chicharras y hasta con fuegos artificiales, los aficionados no dejaron descansar a los uruguayos.

Sin embargo, la cosa de desbordó y la policía tuvo que intervenir para dispersarlos.