Luego de un viaje largo, el futbolista nacional Pedro Ascoy llegó a la ciudad de Manta, y lo primero que hizo fue ponerse la camiseta celeste y blanco, demostrando las ganas que tiene desde ya de transpirarla y dejar todo en el campo de juego.

“Son tres años que he estado en el Aurich, no es fácil dejar un lugar donde te quieren y donde uno ha conseguido cosas importantes”.

Es por eso que manifiesta que viene con una gran ilusión, de hacer un gran año con el equipo, y que pueda darle alegrías a todos los que siguen a los colores celeste y blanco.

“No sé mucho del club, pero es una institución seria, y esperemos hacer las cosas bien. Soy habilidoso, tengo el pique corto, y llegó al área con facilidad”, culminó.