Sergio Markarián no logró el objetivo de clasificar al Mundial de Brasil. Después de la campaña tan pobre de la selección peruana, los hinchas quedaron muy decepcionados tanto del entrenador como el presidente de la Federación, Manuel Burga.

En año nuevo en Perú se acostumbra armar un muñeco lleno de cohetes para quemar todo lo malo, y los comerciantes tuvieron la genial idea de representar a estos muñecos con el rostro de Sergio Markarián y Manuel Burga.