Increíble, pero cierto. Bruno Fernandes, ex arquero del Flamengo de Brasil, podría regresar a las canchas de fútbol luego de ser condenado a 22 años y tres meses de prisión por el asesinato de su ex novia Eliza Samudio, en 2010.

Sin embargo, la justicia brasilera ha sido benevolente con él y le ha permitido firmar un contrato de cinco años con el Montes Claros del Campeonato Mineiro de Brasil.

El jugador de 28 años de edad, quien una vez fue capitán de Flamengo y fue considerado como promesa del fútbol brasilero, ha estado en prisión desde 2010 y confesó los crímenes en los tribunales el año pasado.

La legislación brasileña, de forma increíble, le da a los presos que han mostrado un buen comportamiento en la cárcel por tres o cuatro años, la libertad de trabajo.

Recordemos que en el dictamen de la sentencia Bruno fue acusado de homicidio calificado, secuestro, encarcelamiento privado y ocultación del cadáver de Samudio, desaparecida en 2010 cuando tenía 25 años y cuyos restos no han sido encontrados.

Además, Bruno fue catalogado en aquel juicio como una persona “violenta, fría y disimulada”.

Por su parte, el presidente del Montes Claros, Ville Mocellin, le explicó al diario O Tempo el por qué se están firmando al jugador: “Queremos dar una oportunidad al hombre de Bruno. Para él, se trata de una oportunidad de volver a jugar. En el club , él es un atleta que puede reforzar el equipo y una forma de invertir en el aspecto social”