Cuando eres niño siempre quieres estar al lado de tus ídolos máximos, y más si juegan al fútbol, y el pequeño Bernardo Ramos no fue la excepción. El niño de 8 años logró infiltrarse al campo de entrenamiento al término del mismo de la Selección Brasileña de Fútbol.

Sin embargo, apenas ingresó, los miembros de seguridad fueron a atraparlo, y lo hicieron, pero no contaban que este niño tuviera un superhéroe, uno que usa la legendaria camiseta número ‘10’ de Brasil, Neymar.

La estrella del conjunto del Barcelona de España y de su selección, cruzó la cancha y se llevó al niño con los demás jugadores, donde se tomó un selfie siendo el jugador el que tomó la foto y luego Thiago Silva. Ambos cumplieron el sueño de un pequeño antes del inicio del Mundial.

Los brasileños abren la justa mundialista el día jueves 12 de junio frente a Croacia en el Corinthians Arena.