No fue Arjen Robben, ni ‘súper’ Van Persie, ni muchos menos Wesley Sneijder el que se robó el protagonismo en la victoria de Holanda. El héroe de los ‘tulipanes’ vino desde el banquillo y lleva el nombre de Tim Krul.

Si bien el partido finalizó empatado sin goles: Holanda y Costa Rica ofrecieron un fútbol emocionante donde el vértigo y la sed de triunfo rondo en el área de ambos arqueros en un partido que rompió todos lo pronósticos. Es obvio que la ‘Naranja Mecánica’ era el favorito por sus figuras: Robben, Van Persie, Sneijder y compañía; pero Costa Rica se mantenía firme con la gran actuación de Keylor Navas y de los excelentes contraataques de sus delanteros.

Mientras el miedo y la desesperación rondaban entre todos los holandeses con el transcurrir de los minutos. El entrenador de Louis Van Gaal recurrió a su experiencia para este tipo de definiciones que ya ha tenido en torneos de la Champions League para hacer algo “brillante” y que nadie esperaba.

El DT de Holanda le dio la confianza a Tim Krul, quien ingresó en el minuto 120 del segundo tiempo suplementario en reemplazo de Jasper Cillessen. ¿Y por qué? si bien Costa Rica resistió fue por el trabajo de Keylor Navas pues el DT de Holanda consiguió dar un golpe “emocional” a éste para sacarlo del partido en la ruleta de los penalti.

El guardameta del New Castle asumió con toda responsabilidad su debut en el Mundial de Brasil 2014 en el momento más DIFÍCIL para cualquier futbolista en la tal vez “injusta” o “justa” tanda de los penales. Aquello quedará para la anécdota, ya que por primera vez en la historia de los mundiales se da que, un arquero titular es sustituido en esas instancias del juego.

Tim Krul no es un arquero de la talla Neuer, Courtois o el propio Navas. Pero su espíritu de lucha recargó nuevamente a funcionar en la ‘Naranja Mecánica’ luego de atajar los penales de Bryan Ruiz y Michael Umaña, este último decisivo para que Holanda pase a la semifinal contra otro archirrival: Argentina.