Una vez que Gonzalo Jara estrelló su disparo en el parante, los festejos en Brasil tuvieron un matiz especial y diferente, ya que su alegría se reflejó con lágrimas y llantos producto de la emoción contenida durante los más de 90 minutos de juego que tuvo el duelo ante el seleccionado chileno.

Uno de los más emocionados fue Neymar, quien lloraba con mucho sentimiento y tuvo incluso que ser consolado por el técnico Luiz Felipe Scolari.

La estrella del Barcelona fue de los que más participó del duelo ante los chilenos y fue uno de los jugadores brasileño que no falló su disparo en la tanda de penales.

Brasil y Chile igualaron 1 a 1 tras el tiempo regular y suplementario. En la tanda de penales el Scratch fue algo más efectivo y terminó por imponerse 3 a 2, logrando así su boleto a cuartos de final donde se medirá ante el duro equipo de Colombia.