La selección chilena de fútbol inició su camino en el Mundial Brasil 2014 con un triunfo 3-1 sobre Australia. A pesar del marcador, el partido no fue tan fácil para los mapochos, quienes incluso pudieron retirarse del campo con un empate.

Tras ponerse 2-0 antes del primer cuarto de hora, con tantos de Alexis Sánchez y Jorge Valdivia, los sureños se dejaron estar y los “canguros” lograron el descuento y luego tuvieron contra las cuerdas en gran parte del partido a su rival.

En ese momento, la experiencia, jerarquía y entrega de Alexis Sánchez fue fundamental para la Chile de Jorge Sampaoli.

El delantero del Barcelona no solo fue decisivo en el área rival (abrió el camino del triunfo), sino que presionó la salida del rival, retrocedió en muchos momentos para apoyar en la recuperación y hasta se metió en el área a buscar rechazar los balones aéreos.

La estrella de Sánchez fue vital en Chile, ante la ausencia de Arturo Vidal, quien inició las acciones, pero que apenas sí tocó el balón. El jugador de la Juventus tuvo un pésimo desempeño y Sampaoli demoró en sacarlo del campo. Su bajo nivel se debería a que está saliendo de una dura lesión. Chile también lo va a necesitar, pues ante Australia, se supone, fue el partido más accesible del grupo. Ahora debe enfrentar a España y Holanda, en ese orden.