La selección alemana de fútbol, que se consagró como campeona en el Mundial Brasil 2014 tras vencer a Argentina en la final por 1-0 en el estadio Maracaná, llegó a Berlín este martes, provocando una gran fiesta en sus calles.

El avión que traía a los campeones mundiales aterrizó y desde muchas horas antes, miles de aficionados estaban apostados en los alrededores para recibirlos.

Los jugadores descendieron por una alfombra roja y fueron atendidos como se debía. Abordaron un bus sin techo y llegaron al centro de la ciudad en medio de un mar humano que no paró de alabarlos. Fue algo desbordante e impresionante.

Llegaron a un estrado y ahí armaron la fiesta con los hinchas. Sami Khedira, Thomas Müller, Bastian Schweinsteiger, Toni Kroos, Mario Götze, el entrenador Joachim Low, todos fueron tratados a cuerpo de rey.