El hábil jugador galo padece un problema en la espalda que lo privará de estar presente en la Copa del Mundo. Su nombre se suma a la ya larga lista de estrellas que se perderán la justa mundialista.

“ Me duele en el alma verme obligado a dejar al equipo de Francia y renunciar al Mundial”, declaró visiblemente afectado Franck Ribéry.

“He esperado hasta ahora, después de unos días en los que sentí signos alentadores, para poder estar en el ataque en el partido Francia-Jamaica. Pero, las pruebas a las que me he sometido este viernes han empeorado mis dolores lumbares”, agregó el francés.

Ribéry quiso esperar hasta último minuto, pero las pruebas médicas a las que se sometió terminaron por condenarlo. “La resonancia magnética que pasé en el hospital Rambouillet solo ha podido confirmar las impresiones que tuve en caliente y el empeoramiento de mi dolencia, lo que me incapacita para entrenar y jugar con normalidad. Mi baja es inevitable”, sentenció.