Nadie se quiere perder el Mundial de Brasil 2014, pero hasta que ello ocurra, en pocos días, las personas en el mundo se las ingenian para apurar el tiempo y entretenerse con algo.

De lo contrario no se explica cómo se ideó este partido de fútbol en el que los protagonistas fueron unas ovejas. Sí, estos lanudos animales disputaron un arduo duelo en campo abierto, con las vestimentas completas.

Estaban frente a frente, los equipos “ovejeros” de Colombia y Brasil. Todos bien uniformados, con medias, short, camiseta y hasta número en la espalda. No faltó, como era de esperarse, la “Oveja Neymar” con el número 10.

Al final, ganó el equipo colombiano por 1-0 y la celebración no fue con las tribunas y menos con un vaso de cerveza, como se acostumbra en Alemania, sino comiéndose el campo de juego.