Lugano se limitó a realizar ejercicios físicos de recuperación a un costado del campo del Arena do Jacaré, mientras el resto de la plantilla trabajó con bastante intensidad y en medio de un sol que caía a plomo.

Al momento del entrenamiento, sobre el mediodía en Sete Lagoas, ciudad próxima a Belo Horizonte, la temperatura estuvo próxima a los 30 grados algo similar a lo que se puede encontrar en Natal, al noroeste de Brasil, cuando empiece el decisivo encuentro frente a Italia.

En relación a Lugano, Alberto Pan, médico de Uruguay, dijo que “continúa dolorido y con un proceso inflamatorio en la rodilla izquierda que le impide realizar el máximo esfuerzo”.

“Se mantiene el tratamiento fisiátrico y esperamos su evolución pero es difícil que pueda estar frente a Italia”, agregó.

Lugano, que fue baja de última hora en el partido que Uruguay ganó por 2-1 a Inglaterra, se limitó a realizar ejercicios físicos de estiramiento supervisado por el cuerpo médico y el segundo preparador físico de la plantilla.

En su lugar volverá a jugar el juvenil José María Giménez, del Atlético de Madrid.

Uruguay, que en el debut cayó por 1-3 frente a Costa Rica, necesita superar a Italia para asegurar su boleto a la segunda fase del Mundial.

Costa Rica ya ganaron el suyo de manera anticipada tras la victoria de la víspera por 1-0 frente a Italia.