James Rodríguez fue el encargado de transformar la pena máxima cometida contra Ibarbo, mientras él se dolía en la banda por un fuerte golpe en una cadera que le obligó a dejar el terreno de juego. En su lugar entró Adrián Ramos, que dos años después de su último partido volvía a jugar con Colombia.

Minutos después Ospina, quien no midió bien en un inofensivo centro de los tunecinos y dejó el balón para que Wahbi anotara el tanto del empate a puerta vacía.

Tras el descanso, Colombia reaccionó. Con la entrada de Abel Aguilar, volvió a hacerse con el balón para que Cuadrado y James aparecieran en ataque, si bien les costó poner a prueba a Farouk.