La selección alemana se despidió de su afición en la ciudad de Mainz al golear 6-1 a Armenia, que opuso resistencia hasta el minuto 73, luego se vinieron los cinco goles restantes. La nota amarga la puso una lesión de Marco Reus cuya gravedad todavía no está determinada.

Andreas Schürrle abrió el marcador en el 52 con un remate de tacón dentro del área pequeña a centro de Lukas Podolski, que tuvo una gran noche. El propio Podolski marcó el segundo, en el 71, a pase de Mesut Özil, tres minutos después de que Armenia lograra el empate parcial con un penalti convertido por Henrih Mhkitaryan

Luego marcaron Benedikt Höwedes, en el 73 con un remate doble, primero al cuerpo del portero y luego a la red, a centro de Bastian Schweinsteiger; Miroslav Klose, de cabeza en el 76 a centro de Podolski, y Mario Götze en dos ocasiones, en el 82 y en el 89.

Aunque los goles sólo llegaron en la segunda parte, Alemania tomó desde el comienzo el control del partido ante una Armenia encerrada en su área plenamente concentrada en defenderse y sin ni siquiera intentar sistemáticamente salir al contragolpe.

El partido se jugó desde el comienzo en la mitad armenia y los alemanes intentaban abrir espacios con sus tres hombres más adelantados André Schürrle, Thomas Müller y Marco Reus rotando permanente posiciones.

Llegar a puerta no era fácil para los alemanes pese a tener plenamente sitiada el área contraria y en la primera parte sólo hubo tres ocasiones claras, dos en los pies de Reus y una de Schürrle que no alcanzó a conectar de cabeza un buen centro de Müller desde la derecha.

Más que los goles, las buenas noticias están en el regreso al campo de Philipp Lahm, jugó todo el primer tiempo, y de Bastian Schweinsteiger, que jugó media hora en la segunda parte.

EFE