El jugador español venció en sets corridos al galo, con parciales de 6-1, 7-6(3) y 6-3 en 2 horas y 4 minutos

Será la primera final española desde 2002, cuando Albert Costa se impuso ante Juan Carlos Ferrero, y la cuarta de la historia, tras la de 1998, con victoria de Carlos Moyá sobre Alex Corretja, y la de 1994, donde Sergi Brugera se impuso ante Alberto Berasategui.

David Ferrer, que disputará el domingo su primera final de un Grand Slam, firmó un brillante partido contra el ídolo local, arropado por la gran mayoría de los 15.000 espectadores que siguieron el encuentro desde las gradas de la pista central Philippe Chatrier.

Tsonga, de 28 años y octavo mejor tenista del ránking de la ATP, se concentró en la segunda manga y rompió por primera vez el saque del español para subir el 2-0 al marcador y colocarse después 3-0.

Pero Ferrer, de 31 años y quinto mejor tenista del mundo, supo reaccionar, le arrebató el servicio al de Béziers (2-3) y logró llevar el partido hasta el desempate, done decantó a su favor la segunda manga ante un Tsonga protestón con las decisiones del árbitro.

Con dos sets en el bolsillo, el español no dejó nada al azar en la tercera y definitiva manga. Impecable en el resto, el especialista en tierra rompió una vez más (3-1) el saque de Tsonga, un jugador de superficies rápidas, y se adjudicó el encuentro en su primera bola de partido y sin perder un solo set en todo el torneo.

Ferrer confirmó su condición de favorito frente al Tsonga, con la que fue su tercera victoria en cuatro duelos, treinta años después de que Yannick Noah ganara Roland Garros y se convirtiera en el último francés en levantar la Copa de los Mosqueteros, allá por 1983.

De cara a la final, la estadística dice que Ferrer lo tendrá muy complicado contra Nadal. El mallorquín, de 27 años, ha ganado once de las dieciséis finales de Grand Slam que ha disputado, honor del que nunca ha disfrutado Ferrer, nuevo en el último partido de un “grande”.

Además, el heptacampeón de Roland Garros atesora un parcial de 19 victorias y 4 derrotas contra Ferrer, que inclinó por última vez a Nadal en los cuartos de final del Abierto de Australia de 2011.

EFE