Fue una jornada bastante lamentable. El jueves 2 de abril del año 2000 en el estadio Nacional, jugaban Universitario de Deportes ante Unión Minas de Cerro de Pasco cuando una bombarda lanzada desde la tribuna de oriente mató un niño con síndrome de Down que estaba con su madre en la tribuna de occidente. Una tragedia absurda.
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El alférez de fragata Sergio Encinas fue el que encendió la bombarda en la tribuna oriente, la misma que salió disparada hasta occidente, incrustándose en el ojo de José Mayta Torres, un adolescente con síndrome de Down, que acompañaba a su madre, una vendedora de golosinas en la tribuna preferencial.
Sergio Encinas fue sentenciado a 3 años de prisión, pero la condena fue suspendida. Ello, causó indignación.
Las imágenes dieron la vuelta al mundo, pero en respeto por el dolor de la familia, no reproduciremos el video, que son bastante explícitas.