Roberto Palacios le dice adiós a la celeste, a su Sporting Cristal, a los hinchas que no volverán a verlo jugar profesionalmente. Pero sí lo verán dirigir.

“Es un homenaje que soñé y que se hizo realidad. Le digo a todos, que sueñen que se esfuercen para alcanzar sus dueños porque sí se hacen realidad, me siento feliz, orgulloso de haber nacido en esta hermosa tierra”, expresó Palacios en CMD.

“Ahora empieza una segunda etapa en mi carrera, que es la de entrenador y espero también hacer historia. Lo que yo logre no ha sido fácil, me costó mucho”, agregó.

Palacios reconoció que lloró en la previa a su salida al campo de juego. “Se me cayeron algunas lagrimas en el túnel, sentí una emoción enorme, ahora mismo intento mantenerme en calma. Es difícil saber que voy a jugar por última vez con mi hinchada”, señaló.