Verdadera sorpresa, por los resultados de los encuentros, causaron los primeros partidos de la Copa América, donde la poderosa Argentina con todas sus estrellas no pudo superar a Bolivia, Brasil empató a cero goles con Venezuela y Uruguay no pudo superar a Perú que se presentaba seriamente disminuido por las ausencias de Jefferson farfán y Claudio Pizarro por lesiones.

Estos resultados por demás sorprendentes, nos llevan a plantear ciertos cuestionamientos acerca de que si los equipos denominados “chicos” se han nivelado en su fútbol ó los denominados “grandes” no responden de acuerdo a sus posibilidades por el intenso trajín de sus jugadores estrellas que vienen de los campeonatos europeos.

Conocido es que en estos grandes eventos al equipo local se le programa en su primer partido un rival aparente que en esta oportunidad estuvo cerca de dar una sorpresa y llevarse los primeros 3 puntos en disputa.

Igualmente le pasó en su segundo compromiso frente a la experimentada Colombia, en un partido que pudo haber perdido y con justicia por lo observado dentro del campo de juego.

Sigue la pregunta, ¿hemos mejorado ó el nivel está parejo en todas las selecciones? Brasil, el dueño del “jogo bonito” tampoco apareció y debió conformarse con un magro empate en su partido ante Venezuela, dando la sensación de que faltó el fútbol y que sus estrellas todavía no aparecen en la magnitud que esperan sus hinchas y la prensa especializada.

Los campos de juego son impecables, los estadios se encuentran en perfectas condiciones, el público está respondiendo, salvo el frío, el gran ausente y grave problema sigue siendo la ausencia del buen fútbol.

Es posible que tengamos que pensar en el desgaste físico natural de jugadores que en su mayoría vienen cerrando su campaña anual y que ahora les está pasando la factura, porque nuestro propio seleccionado ha tenido que sufrir la baja de sus jugadores más representativos.

Bajo este panorama seguimos conservando la esperanza de que las expectativas de buen fútbol aparezcan y que los jugadores respondan de acuerdo a sus antecedentes futbolísticos.

Con respecto a nuestro seleccionado patrio obtuvo un empate a cero goles ante Uruguay, equipo que llegó con la mayoría de sus jugadores mundialistas, mostrando solidez defensiva dejando pocos espacios al rival y neutralizando principalmente el juego aéreo del rival.

Paolo Guerrero se mostró como el verdadero líder de Perú que se complementó con el ingreso de Juan Manuel Vargas que demostró que estamos ante un verdadero referente del fútbol internacional.

Perú tuvo tranquilidad dentro del campo, sabiendo a qué jugaba y tentando siempre el arco rival, preocupado más en su propio desenvolvimiento y esto constituye un gran aporte del técnico Markarián que ha sabido transmitirle al equipo una confianza y seguridad que anteriormente no presentábamos.

Ahora nos toca enfrentar a México, un equipo con mixtura de experimentados y jóvenes que vienen destacando en el torneo mexicano y que tienen un fútbol de alto nivel. Sabemos que debemos jugar a ganar mostrando la misma atención defensiva, procurando anotar las situaciones de gol que se nos presenten. El técnico Markarián anuncia algunas variantes como la presencia desde el inicio de Vargas, tratando de reforzar nuestras líneas ofensivas para poder tener un equipo equilibrado en defensa y ataque.

Hasta la próxima…………