El técnico argentino Diego Simeone, entrenador del Atlético de Madrid, dijo tras la eliminación en cuartos de final de la UEFA Champíons League con el Real Madrid (1-0), que hasta la expulsión del turco Arda Turan el partido estaba donde quería y destacó que está “muy orgulloso” de su equipo, que “compitió enormemente bien”.

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”(Hasta la expulsión de Arda) el partido estaba donde queríamos”, explicó el técnico en la rueda de prensa posterior al encuentro, en la que hizo hincapié que la segunda tarjeta amarilla al volante turco “cambió todo el trayecto final del partido”, aunque no profundizó más en la jugada, en si era justa o no la expulsión.

“Sobre la expulsión no tiene sentido opinar. Ya el partido pasó y cualquier cosa que se pueda decir no influye en lo que pueda venir por delante”, valoró sobre esa acción, al tiempo que remarcó: “Me voy orgulloso de mi equipo. Una vez más competimos enormemente bien en una competición muy difícil y muy importante como ésta”.

“Haber llegado a la instancia que llegamos y haber competido me da la seguridad de tener un equipo de hombres, un equipo que trabaja, que a veces juega bien y a veces mal, y tengo un orgullo enorme de estos futbolistas. Estoy agradecido de poder ser entrenador de estos jugadores que han dado todo”, añadió.

“De pequeño me enseñaron que en el juego hay que competir y cuando uno compite y da la vida se va a casa contento. Cuando el equipo trabaja como trabajó, ninguna sensación negativa. Orgulloso de tener estos futbolistas. Hay muchos entrenadores que pueden tener envidia, porque se tiran de cabeza, corren los 90 minutos y dan todo”, insistió.

Simeone transmitió sus “felicitaciones al rival, porque hizo un buen partido y un lindo gol”, y apostó por pensar ahora en la tercera plaza de la Liga Española, en la que enfrentará al Elche este sábado.

EFE