Sean Geddes, centrocampista del Worcester City de Inglaterra , anotó el último fin de semana un verdadero golazo. El volante de 22 años ingresó al área rival, se acomodó y puso el balón sobre el arquero. La pelota ingresó rozando el travesaño y a gritarlo. Un golazo para el recuerdo. Incluso, mejor que el de Erick Lamela .

Como se dice popularmente, el gol “pagó la entrada”. Luego de amagar al que lo estaba marcando, Sean Geddes se acomodó, miró al arquero y como último recurso hizo una rabona. La jugada le salió espectacular. Un gol que recordará por el resto de su vida. Lo más sorprendente de este remate, fue la tranquilidad con la que realizó tremendo gesto técnico.