Marcos Llorente es el heredero de una dinastía de grandes triunfadores tanto en el fútbol como en el baloncesto del Real Madrid. El jugador cumplió su sueño y dio un paso más al marcar su debut frente al Inter de Milán en el primer cotejo de pretemporada, y siguió con esa mística familiar.

El volante mostró un gran nivel y un juego similar al del Xabi Alonso, con su manejo del balón y gran visión para los pases. En la segunda mitad ingresó para adueñarse del mediocampo junto con Asier Illarramendi y distribuyó el balón, en conclusión no desperdició la confianza que le dio Carlo Ancelotti.

Si el entrenador de la ‘Casa Blanca’ y sus asistentes tenían alguna duda esta se va disipando en cada entrenamiento y partido se va ganado un oportunidad en el primer equipo a pesar de que será difícil su inclusión, el volante deberá consolidarse en el Castilla.. Llorente dio el salto del juvenil A al equipo que dirige Zinedine Zidane, donde se perfila como titular.