El delantero sueco tiene una especie de maldición en la Champions League, torneo que hasta el momento no ha ganado y que el destino se encargó de restregárselo en la cara tras cambiarse de equipo.

Zlatan Ibrahimovic tiene dos precedentes importantes de cómo el destino puede castigarte por tomar decisiones equivocadas: cuando el sueco estuvo en el Inter de Milán y luego se marchó al Barcelona, a la temporada siguiente, el club italiano se proclamó campeón de la Champions League.

Luego, cuando dejó el Barcelona para marcharse al AC Milan, en club catalán logró la ‘Orejona’ en la campaña siguiente.

La primera Champions League que disputó Zlatan fue en 2002 con el Ajax de Amsterdam, pero se quedó en semifinales, eliminado por el AC Milan.

Cuando fichó por la Juventus, Ibrahimovic jugó dos años seguidos la Champions y se quedó en cuartos de final por culpa de dos clubes ingleses: Liverpool y Arsenal.

Con el Inter de Milán no pasó de octavos luego de ser eliminados por el Valencia, Liverpool y el Manchester United.

Ahora, luego de la paliza del PSG al Barcelona, muchos creen que el cuadro parisino es claro candidato a llevarse el título de la Champions. Sí, Zlatan militó en el equipo francés la temporada pasada y la maldición se volvería a presentar.

Zlatan Ibrahimovic cumplirá en octubre de este año 36 calendarios y muchas temporadas como profesional al máximo nivel no le quedan.