Después de 39 años la selección de Uganda consiguió clasificar a la Copa Africana de Nacionales y en el estadio se desató una euforia total, tanto así que se produjo una increíble invasión de campo por parte de los hinchas.
Luego de vencer a Comoros por un ajustado marcador de 1-0, los ugandeses pudieron asegurar por fin su participación en el torneo continental de su región, al que no asistían desde 1978.
La estampida humana se desató apenas el árbitro pitó el final del partido. Todos en el Mandela National Stadium de la ciudad de Kampala se levantaron de sus asientos y se dirigieron al campo para celebrar.