Antes de saltar al campo, el aficionado agresor y sus compañeros, insultaron y arrojaron objetos a Eboué, quien acusó de ello al juez del partido.

Fue entonces cuando el hincha saltó al gramado y enfiló hacia Eboué, pero resbaló y de inmediato fue reducido primero por los propios jugadores y luego sacado del campo por los miembros de seguridad.