El futbolista galés faltó al entrenamiento del Manchester United, un día después de que se le identificara como el deportista que solicitó un mandato judicial para evitar la difusión de informaciones sobre una supuesta relación adúltera.

Al término de la sesión de entrenamiento a puertas abiertas que celebró el equipo, el entrenador, Alex Ferguson, rechazó responder preguntas sobre Giggs y sobre su importancia para el equipo.

“Todos los jugadores son importantes para nosotros”, zanjó el técnico, evitando entrar en un asunto que se ha convertido en un gran escándalo mediático en el Reino Unido.

Después de días de rumores, el nombre de Giggs fue mencionado el lunes por el diputado John Hemming, que hace campaña en favor de la libertad de expresión y en contra de los mandatos judiciales que impiden la difusión de informaciones sobre la vida privada de personas famosas que buscan proteger su intimidad.

Hemming mencionó a Giggs afirmando que no sería práctico encarcelar a las 75.000 personas que ya le han nombrado a Twitter como el deportista que presuntamente tuvo una relación con la estrella del programa de televisión “Gran Hermano” Imogen Thomas.