El fútbol ya se ve afectado por los problemas políticos y sociales que tiene el Gobierno de Cristina Fernández en Argentina. Por eso, la Asociación del Fútbol de ese país (AFA) ha decidido suspender cinco partidos de la cuarta jornada que debían jugarse a mitad de semana y serán reprogramados, a raíz de una huelga nacional a la que se sumó el personal del gremio de empleados de estadios (UTEDyC).

El sindicato que agrupa a personal de entidades deportivas y civiles se adhirió a la medida de fuerza de 36 horas, que se iniciará el miércoles al mediodía, convocada por sindicatos opositores al Gobierno de Cristina Fernández.

El comunicado de la AFA informa que los tres partidos del jueves, Banfield-Tigre, Vélez-Lanús y Quilmes-San Lorenzo serán reprogramados por “la falta de personal afectado a la organización” de dichos eventos.

En relación a los partidos que debían disputarse el miércoles, River Plate-Defensa y Justicia y Estudiantes-Boca Juniors, tampoco se disputarán “para sostener la igualdad en las condiciones de competitividad”, añade el ente organizador del fútbol argentino.

También quedaron suspendidos los choques programados para el miércoles entre Atlético Rafaela-Newell’s Old Boys y Rosario Central-Godoy Cruz.

“Es necesario dejar claramente establecido que la programación fue anterior al anuncio del paro y que, por lo tanto, el fixture es ajeno a la obligada postergación”, concluye la AFA en relación al paro convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) opositora al Gobierno nacional.

De tal manera, la cuarta jornada del torneo quedó reducida a los tres partidos de este miércoles: Belgrano-Gimnasia, Olimpo-Independiente y Racing Club-Arsenal.

Tras disputarse las tres primeras fechas, Vélez Sarsfield es líder con puntuación ideal de nueve unidades, seguido por su escolta River Plate, que totaliza siete.

EFE

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